El presidente y candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas Maldonado, consideró este lunes que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) debe darle formal respuesta a la advertencia del presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario, de que la no aprobación de las leyes del régimen electoral y de partidos políticos amenaza el próximo proceso electoral e incluso la democracia nacional.
“La máxima autoridad electoral de la nación se ha referido a una situación que depende al partido de gobierno, mayoritario en el Congreso Nacional, y ha hecho un planteamiento público que no puede ser ignorado”, precisó Vargas Maldonado.
Afirmó que los principales líderes del PLD; el presidente Danilo Medina, por su condición de jefe de Estado, y el ex presidente Leonel Fernández, como presidente del PLD, deben expresar su posición frente a tan delicada advertencia.
Recordó que las reformas al régimen electoral y al sistema de partidos se vienen discutiendo durante décadas, lográndose en los últimos años un amplio consenso, y ambas piezas legislativas sólo están pendientes de aprobación en el Congreso Nacional, de amplia mayoría peledeísta.
Expuso que los partidos, las iglesias, el sector empresarial y la sociedad dominicana en general han dado su visto bueno a ese consenso, recogido en buena parte en los proyectos presentados al Congreso por la JCE, el PRD y otras entidades.
Instruye reintroducir proyecto del PRD
Vargas informó que en el día de hoy está impartiendo instrucciones al bloque de diputados del partido, a través de su vocero, Ruddy González, y el secretario nacional de Asuntos Legales, Salim Ibarra, para que sea reintroducido el proyecto sometido por el PRD al Congreso sobre la reforma electoral y de partidos, a fin de evitar que perima.
Roberto Rosario
El pasado sábado el presidente de la JCE, Roberto Rosario, informó que la no aprobación de las Leyes de Régimen Electoral y de Partidos Políticos se constituye en una seria amenaza para la sanidad de las próximas elecciones generales del 2016, y por ende para la democracia de la República.
Advirtió que en las actuales circunstancias la calidad de la representación política que surjan de las urnas descansará más en la fuerza del dinero que en la fuerza de las convicciones y las ideas, al tiempo de puntualizar que la ausencia de un marco jurídico actualizado impide a la JCE avanzar como lo demandan estos tiempos en la regulación del uso de los recursos públicos y privados, de la propaganda y del activismo electoral en sentido general.
