Reflexión: afrontando con determinación los retos del nuevo año 2016

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Que rumbo al año 2016 el espíritu de la navidad encienda nuevamente la luz y la esperanza que a muchos dominicanos nos ha sido apagada

 

Por el Lic. Santiago R. Castillo

Fuerza Nacional Progresista (FNP)-Polo Soberano

Ya para finalizar el año, considero prudente enviar un mensaje de reflexión y esperanza a todos los dominicanos, pues hoy más que nunca advertir sobre los peligros ante los que estamos expuestos todos los dominicanos se hace necesario.

Este 2015 ha sido un año en el que vimos claramente como sectores de poder foráneo y del país apuestan a la desintegración en todo el sentido de nuestro Estado. La nacionalidad es atacada al punto de que es evidente que estamos en una guerra para fusionarnos con nuestros vecinos haitianos, librando batallas en diferentes campos.

La concepción de Vida y Familia basada en valores cristianos ha sido amenazada para irnos descuartizando como dominicanos, intentándose establecer modelos de integración familiar errados, y sembrando la semilla de un esquema de Educación Sexual distorsionados, para desmembrar nuestra estructuración social a los fines de hacer más fácil la tarea de transculturizarnos.

La Violencia nos arropa, dejando en evidencia que nadie puede librarse de los estragos que está causando. La desigualdad social cada día se va acrecentando, ofreciendo cada día menos condiciones para garantizar el derecho a una vida digna al pueblo dominicano. La corrupción, a todos los niveles, carcome las esperanzas de nuestra gente, mientras unos cuantos disponen del erario público antojadizamente.

Es por eso que invito a la reflexión a todos mis hermanos dominicanos, para que en este año 2016 afrontemos con determinación el reto que el 15 de mayo tenemos, y tomemos el control del rumbo de nuestra nación, con un voto consciente, pensando en el país, su futuro y su gente, por sus mejores intereses, o de lo contrario ser sumisos ante el entreguismo de la patria y un continuismo que por sus orígenes y lo que hemos visto, presagia la desaparición del Estado que a partir de la ofrenda de sangre de nuestros patriotas Juan Pablo Duarte, Sánchez, Mella, Luperón y otros mártires de la gesta independentista y restauradora hemos construido.

Que el espíritu de la navidad encienda nuevamente la luz y la esperanza que a muchos dominicanos nos ha sido apagada. Que el advenimiento del Niño Jesús traiga paz y alegría a todas las almas. Que Dios provea el pan a cada familia, a cada mesa, pero que más que comida material, nos brinde satisfacción espiritual, sabiduría. Que el año nuevo despierte el compromiso que tenemos con la preservación de nuestro Estado Dominicano, y que ese sentir sea lo que se exprese en las elecciones generales del 15 de mayo.

En este tiempo de paz, pensemos en el futuro de República Dominicana, si queremos dejar a nuestras futuras generaciones una nación soberana.

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